Las relaciones sexuales forman parte de la calidad de vida y son un elemento muy importante en la esfera emocional tanto para hombres como para mujeres.
Hasta el 65% de los hombres (a medida que van envejeciendo) suelen tener problemas en la líbido y la calidad de las erecciones por diversas circunstancias como diabetes, problemas de vascularización, hormonales, seniles, emocionales etc. Para tratar de mejorar esta circunstancia te ofrecemos los siguientes consejos:
Mejora tu disfunción eréctil con estos 7 consejos
Mejora la vascularización de los cuerpo cavernosos
Factores como el tabaco, diabetes, exceso de azúcar, triglicéridos, colesterol, aumento de la coagulación y de la densidad sanguínea, generan una arterioesclerosis local y una pérdida de elasticidad de las arterias que llenan de sangre los cuerpos cavernosos; cuando esto ocurre, al tener relaciones sexuales no hay flujo necesario de sangre y oxígeno a éstos, por lo que no se consigue la erección buscada.
Se puede consultar con un urólogo para que realice una ecografía y diversas pruebas para verificar problemas de vascularización en esa zona, que pueden necesitar tratamiento específico.
Vigilar los niveles de hormonas sexuales
Gracias a niveles correctos de hormonas sexuales como testosterona y estrógeno se conseguirá que la calidad de las erecciones sea mayor. Cuando hay poca testosterona la musculatura puede menguar (por ejemplo, como puede verse al realizar actividad física y no obtener beneficios en cuanto a la hipertrofia muscular). Lo mismo ocurre con la musculatura cavernosa del pene que tiene receptores de testosterona y depende de ésta; asimismo, un exceso de estrógeno puede contrarrestar y anular el efecto androgénico que ejerce la testosterona en todo el organismo, afectando tanto la líbido como las erecciones.
Se debe hacer una analítica que mida la testosterona (total y libre), SHBG, niveles de estrógeno y hablar con urólogo y/o endocrino para valorar cada situación particular.
En base a estos resultados individualizados, se puede intentar elevar de forma natural la testosterona, o puede que el testículo no libere eficientemente esta hormona y se recurra a la reposición externa. Independientemente del interés en mejorar las erecciones, es importante tener en cuenta 2 variables para que la testosterona funcione bien en el organismo:
- Mantener la grasa corporal en valores normales: a partir del 16 – 18% de grasa corporal en el hombre y, sobre todo si ésta se acumula en el abdomen, parte de la testosterona se transforma en estrógeno a partir de la aromatasa (enzima que encontramos en la grasa abdominal y visceral).
- Deporte: balancea el ejercicio aeróbico y anaeróbico. Gracias a esto hay niveles adecuados de neurotransmisores como la dopamina y acetilcolina, que se encuentran vinculados a la calidad de las erecciones. Gracias al ejercicio anaeróbico (de fuerza) se expresarán mejor los receptores de testosterona en la musculatura de los cuerpos cavernosos y la testosterona realizará mejor su efecto.
Correcta gestión del estrés
El estrés físico y emocional tiene consecuencias en el funcionamiento correcto de las hormonas sexuales y por ende en la calidad de las erecciones. La elevación de adrenalina, cortisol y prolactina impedirá que haya dopamina suficiente para desear tener relaciones sexuales, y por otro lado el hipotálamo en una condición de estrés crónico sentirá que es el peor momento para buscar relaciones sexuales porque siente que hay un ambiente hostil.
Esto generará una disminución de la hormona liberadora de gonadotropina de forma que la hipófisis no generará LH ni FSH y la capacidad del testículo de liberar testosterona y espermatozoides disminuirá. Como podemos ver, el estrés tiene un efecto muy negativo en toda la esfera sexual. Es importante buscar herramientas para relajarse y mejorar el estrés físico y emocional, como por ejemplo el mindfulness.
Nutrición correcta
Vital por dos razones:
- Obesidad: el aumento del porcentaje de grasa y la inflamación crónica de bajo grado como consecuencia de ese sobrepeso que genera un síndrome metabólico y resistencia a la insulina, afecta negativamente a la liberación de testosterona, al aumento del estrógeno y también en la disminución de dopamina. Se le suma también la predisposición de las arterias a perder elasticidad.
- Déficit calórico: Sobre todo en deportistas, personas que bajan mucho peso en poco tiempo. La pérdida de grasas que son importante para fabricar testosterona y la carencia de proteínas para mantener la masa muscular, harán que el organismo nuevamente considere que se encuentra en un ambiente hostil. Es importante el balance de la alimentación, que haya una correcta gestión en la entrada de proteínas y carbohidratos que puedan generar picos de insulina beneficiosos en el entorno del entrenamiento, un correcto balance omega 6 y 3, y de ingesta de minerales que son cruciales para la vascularización y elasticidad de arterias.
Principios activos fitoterápicos
Activos como la muira puama, mucuna pruriens, maca, epimedium (mejoran la llegada de sangre ayudando a la elasticidad de las arterias), favorecen el aumento de dopamina, e impiden que la prolactina se eleve, lo que nos ayuda a balancear el estrés. También se habla de adaptógenos, como la ashwagandha, rodiola, ginseng, que en esos momentos donde el organismo tiene que luchar ante la inflamación, pueden ayudar a que la esfera sexual no se vea afectada.
Vasodilatadores
Es el siguiente paso luego de seguir los consejos anteriores Antes de recurrir a un fármaco utilizar suplementos naturales como arginina, citrulina malato (4 – 6 g/día) previo a un entrenamiento o por la noche, ya que permite la liberación de óxido nítrico que favorece el llenado de los cuerpos cavernosos.
Los fármacos utilizados son:
- Viagra: Vida media 6 – 8 h para relaciones sexuales a corto plazo. Genera una vasodilatación corporal sistémica, con picor, enrojecimiento de la cara. En personas con problemas cardiovasculares, consumo de nitratos o drogas recreativas puede existir una sinergia fatal, por lo tanto en todos esos casos está absolutamente contraindicado.
- Cialis (tadalafilo): Vida media 48 h, por lo que puede usarse cada 3 – 4 días 20 mg o se puede tomar la dosis de 5 mg diariamente que es el tratamiento ideal en personas con disfunción eréctil crónica.
- Levitra: Vida media 3 – 4 días. Con 1 o 2 píldoras en la semana es suficiente.
Con la toma de estos vasodilatadores químicos es importante incorporar 1 g éster de vitamina C a lo largo del día porque debido a esas vasodilataciones se producirán sustancias reactivas de oxígeno (radicales libres) que pueden afectar la calidad de las arterias, por lo que es necesario consumir antioxidantes.
Por último, vasodilatadores locales, que son infiltraciones de prostaglandinas locales que se tienen que infiltrar previo a la relación sexual en los cuerpos cavernoso del pene con una pequeña inyección con jeringa de insulina. Produce una vasodilatación de 40 a 50 min y su uso no es frecuente, excepto personas con graves problemas de disfunción eréctil o personas con daños neuronales.
7º Vigila el área emocional
Hasta el 70% de los hombres con problemas de disfunción eréctil o impotencia tienen un componente emocional de base como falta de autoestima, miedo, inseguridad, conflictos con la pareja, laborales, etc. En caso de ser necesario se deben indicar 2 o 3 sesiones con un terapeuta sexual certificado que ayude a ver desde lejos el problema, que facilite la comunicación entre la pareja y mejore así la calidad sexual.
¿Quieres aprender más acerca de cómo mejorar nuestras relaciones sexuales?
▶️ En este vídeo os cuento como influye la testosterona en las relaciones sexuales
Conclusión
Los problemas relacionados con la disfunción eréctil son más frecuentes de lo que a veces pensamos. Vigilar algunos parámetros y seguir herramientas guiadas por un profesional cualificado nos ayudará a conseguir una vida sexual más plena y satisfactoria.
