Cada día se habla más del impacto que tiene la inflamación de bajo grado en nuestro cuerpo y hemos visto que la frecuencia de esta patología está aumentando mucho en los últimos tiempos. Está claro que patologías cardiovasculares, intestinales y neurológicas tienen un componente de inflamación basal que genera una inundación sistémica de las citoquinas (moléculas que libera nuestro sistema inmunológico ante una alerta).
Por ello es de vital importancia que al momento de tratar cualquiera de éstas, abordemos el problema de base del sistema inmunológico; en este artículo te explico qué herramientas aplicar para poder tratarlo de una forma adecuada.
Herramientas para Disminuir la inflamación de bajo grado
Ayuno intermitente
La primera herramienta es el ayuno intermitente. Sabemos que hablar de ayuno implica el dejar de comer en períodos que pueden variar entre 12-16 horas y que nos facilita la adherencia a un déficit calórico.
En lo que respecta a la inflamación de bajo grado, el ayuno nos va a aportar dos beneficios principalmente: El primero es la mejoría del territorio intestinal, ya que al dejar de consumir alimentos por ciertas horas, le aportamos al intestino horas de reposo para evitar la sobreexposición constante al ácido clorhídrico que quizá está generando la fermentación de alimentos. Este descanso va a favorecer la reposición de tu flora intestinal, una correcta modulación de la liberación de sales biliares, de ácidos pancreáticos, etc.
El segundo beneficio del ayuno intermitente en lo que se refiere al sistema inmune y la disminución de la inflamación, es la autofagia; este proceso comienza a partir de la última ingesta cuando se registra un descenso de glucosa y tu organismo siente la necesidad de buscar otros recursos energéticos; la ruta nerviosa simpática se activa y se libera adrenalina, noradrenalina y dopamina.
En este punto el organismo facilita la expresión de la autofagia, proceso mediante el cual el cuerpo reconoce antígenos proteicos adversos que no tienen que estar en nuestro organismo, facilita que las mitocondrias eliminen residuos metabólicos, etc; de esta forma nuestro sistema inmunológico va a tender al equilibrio y por ende la disminución paulatina de la inflamación crónica de bajo grado.
Modula y equilibra tu territorio intestinal
La segunda herramienta para disminuir la inflamación de bajo grado es modular y equilibrar tu territorio intestinal, ya que éste es crucial para mejorar el funcionamiento de tu sistema inmunológico. El 90% de las células del sistema inmunológico se encuentran en tu sistema intestinal y de ahí su importancia. También se debe hacer mención a que una alteración en el intestino también afecta a nuestra flora intestinal.
Uno de los marcadores que podemos observar para detectar que existe una inflamación es la calprotectina. Si ésta está muy elevada puede reflejar una inflamación generalizada. Si además existe una permeabilidad intestinal hay una entrada de toxinas y de antígenos proteicos al plasma sanguíneo, lo cual genera una alteración de nuestro sistema inmunológico y una predisposición a enfermedades autoinmunes, sobrecrecimiento de parásitos, de hongos, de cándidas, etc.
Todas las herramientas que vayan dirigidas a mejorar tu territorio intestinal ten por seguro que van a facilitar un correcto funcionamiento de tu sistema inmune y van a modular esa inflamación de bajo grado.
Mejora la resistencia a la insulina
La tercera herramienta incluye el mejorar la resistencia a la insulina. Sabemos que la resistencia periférica a la insulina es un proceso metabólico por el cual los receptores periféricos musculares de la insulina no funcionan bien y ante cada exposición principalmente de carbohidratos tu páncreas libera insulina en exceso. Esta insulina no es capaz de unirse de forma eficiente en los receptores periféricos, por lo que está la entrada de la glucosa al interior de los adipocitos aumenta, generando mayor acumulación de triglicéridos, lo que al final trae como consecuencia una inflamación del tejido adiposo.
Todos estos fenómenos a largo plazo acarrean un aumento en la predisposición a patologías como la diabetes, aunque también causan una elevación de citoquinas lo cual genera una inflamación en diversos órganos y los hace más propensos a padecer microhemorragias. Bajar peso con cualquier tipo de herramienta metabólica nos va a facilitar la mejora de la resistencia a la insulina y va a mejorar indirectamente la inflamación sistémica.
Disminución de la glicación proteica
La Cuarta herramienta nos habla de la disminución de la glicación proteica. Cada vez que ingieres una alta carga glucémica sin una respuesta insulínica adecuada se producen hiperglucemias, dando pie a que la glucosa se deposite generando daños en las estructuras proteicas neuronales ubicadas en la retina, los riñones, en los vasos sanguíneos periféricos, etc.
Esto genera desestructuración e inflamación en los diferentes tejidos, que con el paso del tiempo se pueden cronificar haciendo que tengas predisposición a patologías neurodegenerativas como el Parkinson y Alzheimer. Para contrarrestar este efecto lo más posible podemos suplementar dependiendo del caso a través de diferentes principios activos como la berberina o el ácido alfa-lipoico.
Deporte de alta intensidad
La quinta herramienta para mejorar la inflamación de bajo grado es el deporte de alta intensidad. Se puede decir que la mejor estrategia para facilitar la autofagia en tu organismo es el deporte por su gran capacidad para facilitar que el organismo pueda desintoxicarse de residuos metabólicos.
Aquí hacemos mención a que debe existir un balance correcto entre el deporte aeróbico, que mejora a nivel cardiovascular, aumenta la biogénesis mitocondrial y favorece la oxidación de ácidos grasos y el deporte dirigido a la hipertrofia muscular, ya que a mayor masa muscular, tendrás mayor sensibilidad a la insulina y por tanto va a mejorar tu grado de inflamación sistémica.
Implementación de principios activos
La implementación de principios activos dirigidos a modular tu sistema inmunológico y antiinflamatorios naturales es la sexta herramienta que podemos utilizar. En este sentido tendríamos la cúrcuma, la pimienta negra, el jengibre, la papaína, bromelina y la serrapeptasa.
Esta última es una enzima que ha cobrado bastante auge como antiinflamatorio en los últimos meses por la situación de pandemia y el interés de las personas por los alimentos que ayuden al sistema respiratorio, y también actúa como anticoagulante.
Donde existe una alta oxidación podríamos hablar de la vitamina D, ya que es inmunomoduladora y es una vitamina muy presente en las membranas celulares de la serie blanca. Otros suplementos que podemos hacer mención son la acetilcisteína, ashwagandha, la radiola, eleuterococo, ginseng, etc. Estos principios activos van a favorecer que tú cápsula suprarrenal pueda enfrentarse muchísimo mejor al estrés físico y emocional.
En los estados de inflamación tendríamos que hablar también de las hormonas. Debemos vigilar constantemente nuestras hormonas por medio de una analítica y en caso de tener una deficiencia o exceso de las mismas debemos llevar a cabo estrategias naturales dirigidas a que tu organismo pueda balancear esos niveles.
Balance del sistema nervioso emociona
El balance del sistema nervioso emocional es la séptima herramienta que podemos implementar, ya que una alteración de nuestras emociones puede desequilibrar el sistema nervioso, cambiar los biorritmos y afectar a nivel intestinal haciendo que las comidas no te sienten bien, inflamando el territorio. Esto es fácil de identificar porque cuántas veces has notado que cómo a los 5 o 6 días de haber peleado con alguien se manifiesta de alguna forma un proceso inflamatorio como un herpes, ganglios, etc.
Esta inflamación es consecuencia de un estado de exceso de liberación de catecolaminas que te han permitido sobrevivir pero te han descompensado a nivel hormonal. Implementa actividades que te hagan sentir bien y te hagan drenar todas esas emociones fuertes, todo es cuestión de saber liberar energías; balancear tu sistema emocional beneficiará indirectamente a tu sistema inmune y que la inflamación de bajo grado disminuya.
Fármacos
Los fármacos son la última herramienta, pero no la menos importante; procuraremos inicialmente un tratamiento natural, pero tampoco podemos negar el beneficio que un fármaco puede traer. Si existe una inflamación aguda o cualquier dolor crónico, y debemos recetar fármacos no hay que dudar en hacerlo, siempre bajo indicación y observación médica, procurando preservar el balance integral que intentamos aportar al paciente.
En caso de que sea necesario iniciaremos con la menor dosis efectiva posible, y procuraremos retirarlo al dejar de ser necesario; de esta forma reduciremos los efectos secundarios a corto o largo plazo que puedan aparecer.
¿Sufres de inflamación de bajo grado? Descubre 6 consejos CLAVE que debes tener en cuenta.
Conclusión
Conforme la medicina avanza, se ha podido conocer que los procesos inflamatorios de bajo grado son la base de patologías crónicas que tanto afectan a millones de personas alrededor del mundo en este siglo XXI, es por eso que hemos compartido 8 herramientas claves que puedes incluir en tu vida para mejorar la inflamación de bajo grado y puedas tener una calidad de vida óptima y bienestar integral por el mayor tiempo posible.