SOP: Qué síntomas produce
En los últimos 20 años han ascendido de forma alarmante las cifras de mujeres en edad reproductiva que padecen Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP).
El SOP es un trastorno hormonal caracterizado por desarrollar ovarios de mayor tamaño con pequeños quistes en los bordes externos. Estos quistes dan lugar a liberación de andrógenos, hormonas masculinas, principalmente la testosterona, provocando síntomas y signos masculinizantes en mujeres en edad fértil (hiperandrogenismo).
Algunos de los síntomas que pueden aparecer son: acné juvenil y dermatitis seborreica, pérdida de cabello en la zona frontal y coronilla (alopecia), exceso de vello fuerte y resistente en espalda, hombros, pecho y barbilla (hirsutismo), amenorrea (ausencia de periodo menstrual) o ciclos menstruales irregulares caracterizados por dolor y mucho sangrado (con pérdida de hierro y generando anemia).
Además, muchas mujeres tienen problemas de fertilidad (anovulación), abortos prematuros en el primer trimestre o diabetes gestacional en el tercer trimestre. En muchas ocasiones, estos síntomas son tratados con fármacos, los anticonceptivos (ACOS), los cuales son una opción terapéutica pero no la solución al problema.
Por otro lado, el SOP al ser una endocrinopatía con base metabólica, muchas veces se observa una alteración en los receptores de insulina, dando lugar al aumento de glucosa en sangre, hiperinsulinemia y resistencia a la insulina.
¿Realmente se puede tratar de forma natural el síndrome de ovario poliquístico?
Herramientas para mejorar el SOP
El tratamiento para mejorar la sintomatología de este síndrome tiene que permitir atacar el problema de raíz, es decir, regular la sensibilidad a la insulina y la producción de andrógenos. Para ello existen 8 herramientas claves para abordar el SOP de forma integral y natural:
Dieta baja en hidratos de carbono:
Introducir una alimentación baja en carbohidratos, o una dieta cetogénica bien diseñada, permitirá mejorar la flexibilidad metabólica y regular los niveles de glucosa en ayunas y de insulina. Como mencionamos anteriormente, muchas mujeres con SOP tienen resistencia a la insulina, los receptores periféricos de dicha hormona están desequilibrados, generándose una hiperinsulinemia y dando lugar a los quistes en los ovarios que producen un exceso de testosterona (hiperandrogenismo).
Ayuno intermitente:
La evidencia científica establece una relación en la mejoría de los síntomas y parámetros asociados con la diabetes tipo 2, los cuales se correlacionan muchas veces con el SOP (bajar los niveles de glucosa de la mañana y mejorar la flexibilidad de los receptores a la insulina). Es por ello que realizar un ayuno que consiste en dejar pasar dos, tres o cuatro horas hasta la primera ingesta desde que te has levantado, permitiéndote mejorar la resistencia a la insulina.
Hacer deporte:
Realizar una actividad física de baja intensidad por la mañana en ayunas (por ejemplo andar 40-45 minutos), permitirá disminuir los niveles de glucosa en sangre. Además es necesario realizar un ejercicio físico que permita ganar masa muscular. Hacer 2-3 días a la semana fuerza muscular (hipertrofia) para que los receptores GLUT4 que se encuentran en la musculatura, sean más sensibles y mejore la sensibilidad a la insulina, e indirectamente mejoren todos los síntomas asociados al SOP.
Incorporar esporádicamente una dieta vegana:
En determinados momentos, una dieta basada en plantas bien planificada, rica en carbohidratos de buena calidad (tales como legumbres, quinoa, arroz integral, amaranto, espelta, tubérculos), y nutrientes antiinflamatorios (como los polifenoles, fitonutrientes y fibra), permitirá modular la flora intestinal, mejorar la resistencia periférica a la insulina y disminuir la inflamación crónica de bajo grado, que se encuentra asociada a muchas mujeres que padecen SOP.
Modular el descanso:
Es muy importante mejorar el sueño y los biorritmos, gestionando las emociones y el estrés. Buscar ayuda en un psicólogo, coach, hacer yoga o mindfulness, que permita incorporar herramientas para nivelar la hiperactividad, y evitar entrar en un bucle de nunca acabar, donde ciertas hormonas se elevan (como el cortisol y adrenalina), y provocan ansiedad, depresión y un desequilibrio generalizado.
Mejorar el equilibrio del territorio intestinal:
En los últimos años, muchos estudios han demostrado cómo la microbiota intestinal puede incidir en la sensibilidad a la insulina. Es decir, al mejorar el comportamiento de nuestra flora intestinal (aumentando la absorción de nutrientes y disminuyendo la permeable intestinal), indirectamente permitirá mejorar el metabolismo, disminuir la inflamación crónica de bajo grado y reducir la resistencia a la insulina.
Suplementos naturales:
Existen diferentes principios activos naturales que permiten mejorar los síntomas del SOP. Para mejorar la resistencia a la insulina y el metabolismo de la glucosa: la berberina, el ácido lipoico, mio-inositol, canela. Para disminuir la inflamación: cúrcuma, jengibre, pimienta negra, enzimas proteolíticas. Para inhibir la 5-alfa reductasa (enzima que se encarga de transformar la testosterona en dihidrotestosterona, fracción androgénica que suele generar la caída de cabello y acné): Saw Palmetto, principio activo de una planta.
Anticonceptivos y otros fármacos:
Esta opción es la que debemos optar en determinados momentos o cuando sea necesario, según indicaciones médicas específicas, de forma personalizada y guiada.
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Conclusiones finales
El SOP es una patología que genera numerosos síntomas, empeorando la calidad de vida de muchas mujeres. El tratamiento del SOP debe basarse en un abordaje integral y natural, teniendo en cuenta la modificación de ciertos aspectos del estilo de vida, como es la alimentación, el ejercicio físico, la gestión de las emociones, el descanso, y si es necesario, el uso adecuado de fármacos. De esta manera se mejora la sintomatología y se ataca la base metabólica asociada a la resistencia a la insulina que caracteriza a este síndrome.
